El formato estrella de los torneos internacionales. Cuatro equipos —dos del gobierno y dos de la oposición— se enfrentan en un auténtico combate de ideas donde todo puede pasar. La moción se revela solo 15 minutos antes, un cuento atrás que enciende la adrenalina y exige la máxima agilidad mental. No hay límites temáticos: desde la política hasta la filosofía, pasando por la economía o la ciencia e incluso el amor, esta diversidad mantiene cada debate como un desafío irrepetible. La clave es destacar por tu originalidad, refutar con rapidez y diseccionar los argumentos hasta la raíz, demostrando estrategia y brillantez en el escenario del debate.

Una experiencia inmersiva que te transporta directamente a las sesiones de las Naciones Unidas. Cada participante asume el papel de un país o delegación y defiende los intereses de su estado en debates sobre cuestiones globales. El objetivo no es “ganar”, sino construir consenso a través de la diplomacia, combinando oratória, negociación y redacción de resoluciones que reflejen la complejidad del mundo real. Todo se desarrolla íntegramente en inglés, y exige un sólido conocimiento de historia y actualidad geopolítica para comprender alianzas, tensiones y retos globales. Una experiencia única que te prepara para brillar en entornos internacionales y afrontar los grandes debates de nuestro tiempo.

Un escenario donde la formalidad y la puesta en escena te ponen a prueba tanto como los argumentos. Dos equipos se enfrentan cara a cara defendiendo posiciones opuestas sobre una pregunta clave, preparada con meses de antelación. Cada intervención es corta pero intensa: tienes el tiempo justo para demostrar rigor científico, claridad y capacidad de impactar con tus ideas. Aquí no solo entrenas oratoria: aprendes a convencer con pruebas sólidas, mantener la coherencia argumentativa y brillar ante el público con una exposición impecable.